sábado, febrero 09, 2013

Análisis de la devaluación del Bolívar en Venezuela


Sobre el reciente Viernes Negro

Armando Castany
(tesista del pregrado de Comunicación Social en la Universidad Monteávila, Caracas-Venezuela). 

ADVERTENCIA: el texto es enorme, si quieres saber qué pasa sin saber por qué, vete directo a la conclusión. Dice "CONCLUSION"

Incluso si lo primero que llama la atención es la devaluación del 46,5% hasta 6,30BsF. y que, naturalmente, esto va a tener una incidencia directa en las finanzas personales de cada uno de los venezolanos; hay que recalcar que lo verdaderamente terrible está en las otras dos medidas económicas que tomaremos en los próximos días, según Nelson Merentes y Jorge Giordani.

Conviene resaltar que antes de las elecciones presidenciales del 7-O los sectores oficialistas advertían que, de ganar Capriles, lanzaría un paquetazo económico neoliberal, también debemos recordar que hace poco más de un mes, el Ministro del Poder Popular de Planificación y Finanzas Jorge Giordani, al igual que el Presidente del BCV, Nelson Merentes, insistían en que no estaba planeada ninguna devaluación.

La realidad es que un paquetazo económico neoliberal o un viernes negro es una realidad ineludible e impostergable. Independientemente de quién ganara, estas medidas se iban, se tenían, que tomar. Me solidarizo con la amargura de aquellos que, creyéndole a un bando o a otro, se dan cuenta ahora que han sido engañados.

Primeramente, sobre la devaluación. Hay que considerar que entre el 40 y el 70% de los alimentos que consumimos diariamente son importados al dólar oficial. Esos alimentos, a primera vista, uno podría pensar que subirán. En realidad y durante los próximos seis meses, el precio de esos productos importados (generalmente por el gobierno) se mantendrá igual, pues en gaceta se mantiene el dolar a 4,30 para algunos rubros esenciales (entre ellos alimentos).

Pocas cosas se traen a dólar oficial. Cuando el dólar paralelo se disparó por encima de los 20BsF muchos comercios modificaron sus precios acorde y empezaron a comercializar esas mercancías a precios muy superiores. Por poner un ejemplo, en los aparatos electrónicos los teléfonos celulares de gama alta subieron más del 100% de su valor, en cuestión de unas pocas semanas. Esto implica que si el gobierno nacional da dólares, o si existieran suficientes dólares para todas nuestras importaciones, los precios de hecho bajarían.

Pero la realidad es que no hay suficientes dólares, PDVSA produce anualmente 35 millardos de dólares ($35.000.000.000) y nosotros importamos anualmente entre 30.000 y 50.000 millones de $. No todos los $ que producen los hidrocarburos son utilizados exclusivamente para la importación, como es de esperar. Para satisfacer la demanda de dólares se creó el SITME, un sistema de bandas que consistía en emitir bonos, endeudando a la nación, que eran transados en dólares. Esto contribuyó, entre otras cosas, a que nuestra deuda pública esté alrededor de los 110 millardos de dólares (110.000.000.000). En la cuarta república, la deuda máxima fue de 22 millardos de $. 

Con este paquetazo, se cierra definitivamente el SITME y con él se tranca el chorro de dólares y la emisión de bonos de la deuda. ¿De dónde saldrá el resto de los dólares que se cotizaban gracias a ese mercado, incluyendo los dólares para viajes a precios entre 5,5 y 7,50? 

Pues, de ninguna parte. Giordani y Merentes crearon una nueva comisión, superior a CADIVI que será el ente gubernamental encargado de asignar las divisas según los intereses y necesidades del Plan Socialista de Desarrollo de la Nación 2013-2019.

No hay manera de anticipar el funcionamiento exacto del nuevo ente superior, pero uno podría suponer que, dada una oferta muy inferior de dólares y una demanda cada vez mayor; el precio del dólar en el mercado negro se va a disparar por los cielos; sumado a que la liquidez económica (el dinero circulante en el país) ha subido 178% desde el 2008, esto bien podría irse acercando a una hiperinflación –a la que aún no hemos llegado, pues la nuestra es apenas 'galopante', intente imagine lo que se nos viene encima y considere para este ejercicio que la inflación en enero de 2013 fue de 3.3% el doble del mismo mes el año pasado–

Convendría de todas formas destacar el aspecto positivo, al menos en la teoría, de las medidas económicas de hoy: las exportaciones. Se permite a los venezolanos abrir cuentas en dólares y los empresarios pueden hacer uso hasta el del 40% de las divisas que perciben por motivo de exportación de sus mercancías. 

Así, se espera que los empresarios privados y públicos empiecen a exportar sus mercancías y esto cree una liquidez de divisas para la importación.

Además, otro aspecto importante y positivo de la devaluación, es que solventa ligeramente el problema de la sobrevaluación del bolívar, haciendo nuestros productos más competitivos económicamente en el mercado internacional.

CONCLUSION:

Este viernes negro y paquetazo económico, considerando todas las cosas que he explicado anteriormente, es de hecho muy leve para donde estamos en la economía. En los próximos meses podrán apreciar una escasez focalizada de aquellos productos y servicios que no repunten muy alto en la lista de intereses en el Plan Socialista de Desarrollo de la Nación 2013-2019, a la vez que tendremos una sensación muy fuerte de inflación. Esto se mantendrá y agudizará en los próximos años, llegando a ser necesario (quizás en un corto plazo) un segundo paquetazo y un segundo viernes negro, posiblemente, luego de las elecciones presidenciales. Estos paquetazos son ineludibles y hasta cierto punto, impostergables. Lo único que podría aliviar esta situación es que Venezuela se convierta en un exportador de otras industrias y no sólo la minera e hidrocarburos. 

(Risas).

Pueden ver la noticia relatada por la BBC aquí. 

No hay comentarios.: