sábado, septiembre 10, 2011

La renuncia de Jürgen Stark y la (in)estabilidad del euro

La noticia de la semana es del viernes en la tarde. La renuncia del economista jefe del Banco central europeo (BCE o EZB, en alemán), produjo una caída del DAX en más de un 3% (algunos dicen que es responsable de un -3,21% y otros, de un -4,04%, así como con el  Temblor en Niederrhein, carecemos de precisión en las cifras) y del Dow Jones en 2,7%.

Después de la renuncia de Axel Weber (ver Axel Weber y los principios: autonomía e independencia del Banco central y estabilidad de la moneda), nos quedamos sin "guardián de la estabilidad" (algunos le llaman "halcón", lenguaje que no me gusta demasiado), en el BCE.

Los otros miembros del directorio, además del Presidente, el francés Trichet y del joven Weidman, son un espanol, un portugués, un italiano y un belga, como hace ver el editorial de hoy de la Hessische/Niedersächsische Allgemeine de hoy que, luego de esta enumeración, pregunta si tenemos alguna pregunta... Y se refiere al grave peligro de la temida inflación.

Stark, al igual que Weber, no estaba de acuerdo -quién podría estarlo?- con la compra de bonos de los países en dificultades. La gota que rebalsó el vaso y contra la cual escribió ayer en el Handelsblatt fue la adquisición de bonos italianos y espanoles, que él considera -con mucha razón- como inadmisible.

Su sucesor será, probablemente, Jörg Asmussen, de quien no se conoce una postura demasiado fuerte en defensa de la estabilidad del euro.

Les recuerdo que, hace algunos días, el ministro Schäuble aseguró: "la estabilidad está asegurada". Frase que nos recordó inmaediatamente aquella del entonces ministro Blüm, "la jubilación está asegurada"... Lo que sabemos que no es efectivo. La frase schäubliana provocó una sonrisa burlona entre los expertos en finanzas.

De alguna manera, la misma canciller es responsable de la renuncia de Stark, como lo fue de la de Weber, ya que no los apoyó. Muy por el contrario, junto a su colega Sarkozy, conminó a Trichet a comprar bonos PIGS. Es cierto que se debe, en parte, a que falta el Fondo de rescate; sin embago, nos podemos preguntar qué ocurrirá cuando los fondos del Fondo (valga la redundancia) se acaben, se gasten... Nuevamente tocará el BCE adquirir bonos PIGS, conviertiéndose en una suerte de bad bank? Al parecer, el BCE no es tan independiente como creíamos...

Entre tanto, Madame Lagarde sigue echando bencina al fuego; temas: 1) capital de bancos europeos, fuertemente criticada -con mucha razón- por Ackermann y 2) proposición de un paquete de ayuda alemana, proposición ante la cual no podemos sino quedarnos con la boca abierta. Weidmann hizo ver ayer en el marco de la reunión G9, en Marsella (Francia preside en G9 en estos momentos), que "el pesimismo coyuntural no conduce a nada". Y, también en Marsella, Schäuble advierte que "el mandamiento (Gebot) de la hora es ahorrar", ergo, no gastar en paquetes de reactivación de la economía. Tienen razón los alemanes. Ojalá que no se queden en las palabras, sino que estas se traduzcan en hechos.

Existe un grupo de jóvenes empresarios alemanes, llamado "Salvemos el euro, pero salvémoslo correctamente" (Rettet den Euro, aber richtig), me uno a sus intenciones, les deseo lo mejor y les agradezco su compromiso; me parece que esta debería ser la consigna del momento. Todos queremos salvar al euro, nadie quiere volver a las monedas nacionales, queremos un mercado libre dentro de Europa, pero uno competitivo (ver Se acabó la competividad en la Zona euro?).

La imagen muestra la proyección de su slogan, por parte de los jóvenes empresarios la noche del 7.09 en la Cancillería federal. Bien! Una buena forma de protestar. Gracias por subirla a FB.


1 comentario:

Agustin Mackinlay dijo...

¡Quien puede estar de acuerdo con comprar bonos de Italia & España? Anotame a mí, Marta. Claro que sí! Si Alemania --que ganó enormemente con el €-- se metió en el proyecto, debe seguir adelante. Hasta un niño entiende que si TODO el mundo practica austeridad al mismo tiempo, no hay solución posible. Los PIIGS tienen que ser austeros -- pero los alemanes (y los chinos, y los superavitarios en general) tienen que ser expansivos!

Qué es eso de meterse en el proyecto y sabotearlo a mitdad de camino. Mal Herr Stark, muy mal!

Saludos,

Agustin Mackinlay